Se vio perfectamente en toda España, salvo en algunas zonas con nubes. A las 21.18 de ayer (hora peninsular) comenzó el contacto de la Luna con la sombra que producía la interposición de la Tierra entre el satélite y el Sol. Se convirtió en una bola rosada a las 23.44. El eclipse finalizó a las 3.23.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 4 de marzo de 2007