El lema "El éxito a través de la investigación" es el adoptado por la presidencia alemana del Consejo de la Unión Europea este semestre, y Alemania lo está aplicando al resaltar todo lo relativo a la ciencia. La jornada en la que se hicieron públicos, la pasada semana, los premios Descartes correspondientes a 2006, en los que han sobresalido los científicos alemanes, contó con la presencia en todos los actos de la ministra alemana de Educación e Investigación, Annette Schavan, quien inauguró en Bruselas dos exposiciones de contenido científico organizadas por instituciones alemanas. Junto al presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso y el comisario de Investigación, Janez Potocnik, Schavan celebró asimismo el medio siglo de la UE y el lanzamiento del VII Programa Marco de Investigación y Desarrollo, resaltando la importancia estratégica de la investigación europea en la creación y mantenimiento de una Europa competitiva y sostenible.
El millón de euros con que está dotado el Premio Descartes a la Investigación en Colaboración se ha dividido este año entre tres proyectos: el telescopio HESS de altas energías, en realidad cuatro instrumentos del tipo Cherenkov situados en Namibia, que lidera Alemania y en el que participa un centenar de científicos europeos; el proyecto Hydrosol, de Grecia, Alemania, Dinamarca y Reino Unido, que ha desarrollado un método para producir hidrógeno a partir del agua utilizando la energía solar; y el proyecto Apoptosis de biología celular, con Francia, Austria, Dinamarca, Italia, Suecia y Alemania, que ha avanzado en el conocimiento de los procesos de muerte celular programada. El jurado estuvo presidido por la astronauta francesa y ex ministra Claudie Haigneré.
Los científicos alemanes sobresalen entre los galardonados porque participan en todos los proyectos de investigación destacados por el jurado del premio Descartes -los tres premiados y los cinco finalistas-, como líderes o como asociados.
Por el contrario, la representación española es muy escasa: Jurgen Eschner, del Instituto de Ciencias Fotónicas de Barcelona y Fabrizio Bernardi, de la Universidad Nacional de Educación a Distancia participan en sendos proyectos finalistas.
Además, cinco proyectos de comunicación y divulgación científicas han compartido el premio Descartes de Comunicación, dotado con 250.000 euros. La Citta della Scienza en Nápoles, la revista irlandesa Eureka destinada al público infantil, la serie documental Europa, a natural history, la red Mar-Eco de exploración del océano Atlántico y el espectáculo escolar británico Science made simple han sido los ganadores. Ha resultado finalista el ecólogo español Ramón Folch, por la exposición Habitar el mundo, realizada en el Foro de Barcelona en 2004.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 14 de marzo de 2007