La falta de tensión eléctrica en el tramo de la red de Cercanías entre Chamartín y Cantoblanco provocó ayer retrasos de hasta media hora en dos líneas del tren, y de unos diez minutos en otra. La incidencia se produjo entre las seis y las diez de la mañana, según fuentes de Cercanías de Renfe.
La avería sólo afectó a una de las vías, por lo que no se interrumpió totalmente el servicio, pero obligó a concentrar la circulación en ambos sentidos en una sola vía, lo que causó los retrasos.
La línea C-1 sufrió demoras de unos diez minutos entre Chamartín y Alcobendas-San Sebastián de los Reyes, mientras que la C-7 y la C-10, entre Chamartín y Tres Cantos y entre Chamartín y Colmenar Viejo, respectivamente, registraron retrasos de hasta media hora.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 28 de marzo de 2007