El jurado popular de la Audiencia Provincial de Madrid encargado de pronunciarse sobre el caso de Agnieszka Kaps, la mujer polaca de 26 años acusada de matar a golpes a su hija recién nacida en junio de 2004, declaró a la procesada inocente, por unanimidad.
Según informaron fuentes del tribunal, el jurado adoptó la decisión después de 24 horas de deliberación. La Fiscalía pidió para la acusada 11 años y siete meses de cárcel, entendiendo que "la muerte del bebé se produjo por una presión que hizo la madre a ambos lados de su cabeza", y que Agnieszka "aceptó una posible muerte del bebé", porque "en lugar de tomar las medidas necesarias, como acudir al hospital", tuvo al bebé en el baño, "consciente de que podía traer problemas". La defensa solicitó la absolución de la mujer ya que "sólo hay conjeturas y no pruebas claras de que Agnieszka la matara", ya que "en ese caso se hubiera deshecho del feto y no hubiera llamado a nadie".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 29 de marzo de 2007