La responsable de Pesca e Asuntos Marítimos, Carmen Gallego, ha solicitado a la Consellería de Medio Ambiente un plan de medidas urgentes destinado a paliar el nivel de bacterias coliformes que ha obligado a rebajar de categoría los bancos marisqueros del interior de la ría de Pontevedra, Baiona y O Burgo. Gallego comunicó ayer esta decisión en el transcurso de un encuentro celebrado en Vigo con los responsables de las cofradías del fondo de la ría pontevedresa (Raxó, Lourizán y Pontevedra) que, ante el cambio de catalogación de B a C, exigieron a la conselleira que les recibiese antes del día 14. Sin embargo, la propuesta de Pesca sigue sin convencer al sector, que se volverá a reunir el martes para estudiar la puesta en marcha de medidas de presión ya que entienden que es imprescindible la implicación de ayuntamientos y autoridades portuarias, "mientras la conselleira sólo acepta a cofradías y sindicatos en la mesa de trabajo que le propusimos".
Gallego confía en que el informe medioambiental esté listo la semana que viene, cuando volverá a convocar a los productores para concretar las medidas a aplicar con el fin de mejorar la calidad de las aguas. En cualquier caso, desde este departamento insisten en que el sector "no sufrirá pérdidas de renta" a causa de esta modificación.
Casi a la misma hora, en Poio, el diputado popular José Manuel Balseiro destacaba la conveniencia de que Carmen Gallego y la ministra de Sanidad, Elena Salgado, viajasen a Bruselas para negociar la aplicación de una moratoria para Galicia en la aplicación del nuevo reglamento europeo. "Todavía estamos a tiempo", dice. El PP atribuye a "un despiste aparente" que el actual Gobierno autonómico no continuase las gestiones iniciadas por el anterior conselleiro de Pesca, Enrique López Veiga, y que, según afirma, hubieran permitido durante un periodo limitado mantener los baremos sanitarios anteriores a 2006. "Dejaron a Galicia en una situación de debilidad con respecto a otros países", asegura. Por ello instan a Gallego a que haga públicas las gestiones llevadas a cabo por su departamento en este sentido. Con todo, los pósitos no han tardado en recordar al PP que esta situación es una "herencia" del anterior Gobierno de la Xunta y que una moratoria no es la solución. Una de las mayores preocupaciones del colectivo marisquero es garantizar la campaña de verano.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 14 de abril de 2007