Boca Juniors no pudo quebrar el maleficio de dos años sin victorias ante su eterno rival, River Plate, en el gran clásico argentino. Empataron ayer (1-1) en el estadio de La Bombonera un partido vibrante. El resultado permitió a San Lorenzo mantenerse como líder solitario del torneo Clausura tras disputarse la décima jornada.
El centrocampista boquense Pablo Ledesma abrió el marcador antes de que se cumpliera el primer minuto de juego. Lo hizo aprovechando un pase perfecto de Juan Román Riquelme. En los 44 restantes de la primera parte el portero del River, Juan Pablo Carrizo, evitó la goleada ante un rival superior, ambicioso y más profundo.
River mejoró en el segundo tiempo. Igualó Mauro Rosales y el encuentro tuvo más equilibrio, porque Boca perdió claridad y cometió varios fallos defensivos. Guillermo Barros Schelotto, el viejo extremo derecho, sustituyó a Palacios a los 85 minutos y se despidió del público de Boca Junioras tras una década en el club, en la que obtuvo 14 títulos de campeón. Continuará su carrera en Estados Unidos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 16 de abril de 2007