Miles de daneses acudieron ayer a la plaza del Palacio Real de Amalienborg, en Copenhague, para felicitar a la reina Margarita II, que cumplió 67 años. A las 12.00, como marca la tradición, la reina salió al balcón del palacete acompañada por su esposo, el príncipe Enrique; los príncipes herederos Federico y Mary, con su hijo Christian, y el príncipe Joaquín y sus dos niños, Nicolás y Félix. El pequeño Christian le propinó a su madre un cabezazo en la nariz sorprendido por la fiesta. Mary dará a luz dentro de tres semanas al segundo de sus hijos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 17 de abril de 2007