El Senado aprobó ayer por unanimidad una moción suscrita por todos los grupos parlamentarios de la Cámara alta en apoyo a los brigadistas polacos que participaron en la Guerra Civil española, después de que el Gobierno de su país anunciase su intención de retirarles sus derechos y pensiones. En la moción, el Senado insta al Gobierno a que muestre su "total solidaridad" con los supervivientes polacos de las Brigadas Internacionales y a que manifieste su rechazo ante "cualquier medida discriminatoria" que pueda adoptarse contra ellos.
La iniciativa surgió después de que el Ejecutivo polaco promoviese un proyecto de ley que suprimirá las rentas especiales concedidas a los veteranos de la Segunda Guerra Mundial, lo que afecta a los brigadistas que combatieron en España en defensa de la II República. Esto significa que perderán el suplemento de 200 zlotys (50 euros) que cobran por ese concepto y dejarán de beneficiarse de la reducción del precio de las medicinas y de los viajes en los medios del transporte público.
El Senado cree que, con esta actitud, el Gobierno polaco "está incumpliendo los compromisos adquiridos como miembro del Consejo de Europa y de la Unión Europea de respetar los derechos humanos y democráticos. El texto manifiesta además su rechazo ante cualquier medida que implique "no sólo una violación de los derechos humanos sino, en este flagrante caso, de la simple y noble dignidad humana".
La nota discordante del día, informa Efe, la puso el diputado ultracatólico polaco Artur Zawisza, quien aseguró que el Gobierno de Varsovia no tiene por qué tratar de manera privilegiada a personas que combatieron "por una causa extraña".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 18 de abril de 2007