Militantes de EA y PNV repiten la alianza electoral que descartó el primer partido al presentarse como agrupaciones independientes en seis municipios de Guipúzcoa y dos de Alava. Tratan de asegurarse así el mantenimiento del gobierno municipal, que no conseguirían solos. La ejecutiva nacional de EA desaprueba la idea en los dos municipios fuertes como Oiartzun y Salvatierra, pero no así en Elciego, Asteasu, Segura, Elgeta, Idiazabal y Zegama.
En Guipúzcoa, esta alianza puntual entre EA y PNV es principalmente un blindaje ante la posible presencia de la izquierda abertzale en cualquiera de sus fórmulas electorales. En los dos municipios alaveses, sin embargo, obedece a otros motivos. En Elciego tratan de hacer frente al pacto que hace cuatro años formalizaron socialistas y populares y les arrebató la alcaldía, mientras que en Salvatierra-Agurain, su alcalde Iñaki Beraza -el primero en rebelarse públicamente contra la decisión de presentarse en solitario- trata de retener el cargo de regidor, que sin el apoyo del PNV seguramente no conseguiría.
La cuestión es que a los dos partidos nacionalistas les ha interesado asegurarse de que van a mantener estas pequeñas parcelas de poder municipal. En particular a EA, la gran beneficiaria de este acuerdo tácito que le proporcionaría siete de las ocho alcaldías -el PNV sólo encabeza la agrupación de Elgeta-. Esto independientemente de lo que consigan con sus propias candidatutas y los pactos postelectorales que podrán formalizar según los resultados.
Aunque la medida puede interpretarse como un acto de rebelión contra la decisión de la ejecutiva nacional de EA, ratificada en un congreso por la polémica que originó, la dirección pretende quitar hierro al tema, ya que afecta principalmente a pequeños pueblos. Fuentes internas han asegurado que no va a adoptar medidas, salvo en los casos de Oiartzun (9.753 habitantes) y Salvatierra (4.112), donde desaprueba el pacto al ser localidades importante.
De hecho, la ejecutiva de Alava ha expresado su rechazo a la candidatura promovida por Beraza afirmando que no cuenta con el visto bueno del partido. Desde la ejecutiva guipuzcoana se afirmaba ayer que nadie puede discutir la afiliación a EA de Martín Beramendi, el alcalde de Oiartzun.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 24 de abril de 2007