Antes del verano estarán en funcionamiento los tres primeros tramos de la autovía del Cantábrico (A-8) en la provincia de Lugo. Así lo anunció ayer el Secretario de Estado de Infraestructuras del Ministerio de Fomento, Víctor Morlán que supervisó en Lugo algunas de las obras que ejecuta su departamento. Serán 21,6 kilómetros que comprenderán los tramos Ribadeo-Reinante, Abeledo-Regovide y Regovide-Vilalba.
Aprovechó la ocasión para destacar el "gran impulso" que recibió esta infraestructura viaria en esta legislatura. "De los 14 tramos de la A-8 en la provincia de Lugo, en abril de 2004 sólo uno contaba con la adjudicación de la obra. Nosotros, tras tres años de gobierno, hemos conseguido que todos estos tramos estén en ejecución o en licitación", precisó.
También se refirió a la autovía Santiago-Lugo (A-54) para recordar que están aprobados los estudios informativos de los tramos Lavacolla-Arzúa y Palas-Lugo y está pendiente el tramo Arzúa-Palas para definir el paso por la sierra de O Careón, declarada Lugar de Interés Cultural. "Hasta que eso no se resuelva, no podremos avanzar" en ese tramo, reconoció.
En este año, dijo, se procederá a la contratación de dos tramos de esta autovía entre Monte de Meda y la conexión con la ciudad de Lugo, con una inversión de 76,4 millones de euros.
De la autovía Lugo-Ourense (A-56) indicó que está aprobado el estudio informativo de todos los tramos; se encuentran en fase de redacción 6 de los 7 proyectos y se licitará de inmediato el último proyecto que falta entre Ourense y el enlace con Cambeo. Además, se prevé que entre San Martiño (Ourense) y el enlace con A Barrela (Lugo) se liciten las obras antes de fin de año.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 25 de abril de 2007