Francia es el principal socio comercial de España, por lo que los resultados de las elecciones de hoy y las decisiones que tome su futuro presidente serán decisivas para esta relación. Aunque la UE deja poco espacio para acuerdos preferentes, la cercanía de Rodríguez Zapatero con Royal podría dar un impulso a los intercambios y a la cooperación, una situación menos cercana si es que Sarkozy -quien sintoniza mejor con Mariano Rajoy- resulta elegido.
Francia es el primer comprador de productos españoles y su segundo proveedor. Según la Embajada española, los dos países intercambian a diario más de 180 millones de euros.
Como proveedor de Francia, España ocupa un cuarto puesto con una cuota del 7,6%. Al tiempo es su segundo cliente con una cuota del 10,7%.
El número de empresas españolas instaladas en Francia puede estimarse entre 400 y 500, aunque poco más de un centenar tienen carácter netamente industrial o comercial. Las inversiones españolas en Francia llegaron a los 2.969 millones en 2004 y las francesas en España a 1.079 millones.
Las empresas francesas en España son protagonistas de una parte significativa del comercio bilateral en ambos sentidos. Se estima que en la actualidad hay más de 1.200 filiales españolas de empresas francesas que dan empleo a unas 200.000 personas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 6 de mayo de 2007