"Estará en residencia vigilada", ha dicho al diario Le Monde una alta fuente policial sobre la nueva ministra del Interior, Michèle Alliot-Marie, de 60 años, que ocupa el Palacio de Beauvau, del que salió Nicolas Sarkozy para competir por la Presidencia.
La gestión de Alliot-Marie, ex ministra de Defensa y antigua alcaldesa de la ciudad vascofrancesa de San Juan de Luz, estará vigilada muy de cerca por el presidente, porque se trata de un terreno que Sarkozy conoce muy bien y porque la seguridad y el orden es uno de los campos en los que se juega su imagen.
Alliot-Marie, que afirma que nunca ha tenido tiempo para casarse con su compañero, el ex presidente de la Asamblea Nacional Patrick Ollier, y a la que no le gusta que la llamen ministra para marcar que importa la función y no el género, fue la primera mujer al frente de Exteriores y es una gaullista chiraquiana tan convencida como militante.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 19 de mayo de 2007