La candidata a la alcaldía de Barcelona por ICV-EUiA, Imma Mayol, explicó ayer que Barcelona debe prepararse para poder favorecer la generalización de los coches eléctricos. La alcaldable se mostró partidaria de instalar tomas de fluido eléctrico en los aparcamientos municipales y subvencionar a los privados para que también cuenten con cargadores. Apostó asimismo por la sustitución de la flota de vehículos municipales por modelos híbridos, de gas y biodiésel.
En el Centro Cívico del Carmel, uno de los 35 equipamientos públicos que disponen de placas fotovoltaicas, Mayol anunció que una nueva ordenanza obligará a extender su colocación en toda la ciudad. La normativa afectará a comercios, hoteles y hospitales de más de 3.000 metros cuadrados, así como oficinas, escuelas, bibliotecas y otros equipamientos públicos con una superficie superior a los 1.500 metros.
Sin embargo, reconoció que no se considera su instalación en viviendas porque resultaría "demasiado caro". La medida, según Mayol, podría entrar en vigor a mediados de 2008, ya que en estos momentos se encuentra en trámite administrativo. La líder ecosocialista apostó además por una nueva ordenanza de eficiencia energética y por adaptar los edificios municipales a nuevos criterios de ahorro.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 20 de mayo de 2007