Cuatro varones homosexuales holandeses han sido detenidos por la policía de Groningen (noreste del país) por haber drogado con éxtasis líquido añadido a las bebidas y después violado e inyectado sangre infectada con el VIH (el virus que causa el sida) al menos a otros 12 gays.
Los hechos ocurrieron en el curso de varias fiestas privadas y la policía teme que haya más víctimas. Tres de los arrestados han admitido su autoría, y han dicho que "querían tener un subidón y sexo puro sin protección". Los afectados que han denunciado el asalto tienen entre 25 y 50 años de edad y conocieron a los agresores a través de Internet. Los detenidos podrían ser encarcelados hasta 16 años.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 1 de junio de 2007