Hay apellidos que han marcado la historia de los grandes negocios, familias que durante generaciones han manejado auténticos imperios. Los logros, pasiones, dramas y secretos de dinastías como los Guggenheim, los Morgan o los Toyoda (tres sagas familiares que se corresponden con otras tantas formas de explotación de los recursos económicos: minería, banca y automóviles) forman parte del reportaje que la revista Gentleman dedica este mes a alguno de los apellidos más ilustres del capitalismo en los últimos dos siglos. El trabajo es un extracto de una obra del profesor emérito de historia y ciencias económicas de la Universidad de Harvard David S. Landes -que ha publicado en España la editorial Crítica-, y profundiza en el análisis de un "capitalismo de familia" que ha hecho de la voluntad, la ambición y la fidelidad al clan valores en los que sustentar sus propósitos, a pesar de que, en la mayoría de los casos, las dinastías familiares han derivado en sociedades tan anónimas como globales y han terminado, como en el caso de los Guggenheim, por constituir fundaciones de carácter filantrópico. Las familias del dinero son hoy muchas familias diferentes, cuando no sociedades de extraños.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 5 de junio de 2007