El poderío exportador de China aumenta de forma vertiginosa. Según los datos publicados ayer por la Administración General de Aduanas del país asiático, el superávit comercial acumulado en los cinco primeros meses de 2007 alcanza los 64.230 millones de euros, un 84% más que en el mismo periodo del año pasado.
Sólo en mayo, la diferencia entre exportaciones e importaciones dejó un saldo positivo de 16.862 millones. Respecto al mismo mes de 2006, el incremento en el superávit de mayo es también muy notable, un 73% más.
Estas cifras son una nueva constatación de que las promesas del Gobierno chino de rebajar su desequilibrio comercial se quedan en buenas palabras. La aceleración del superávit del país asiático refuerza la argumentación de Estados Unidos y la Unión Europea que exigen una revaluación de la moneda china (el cambio se sitúa ahora en 10,23 yuanes por cada euro).
Tras 10 años de cambio fijo, China aceptó en 2005 instaurar una banda de fluctuación con unos topes diarios del 3% con una cesta de monedas (entre ellas, el euro y el yen), pero sólo del 0,3% con el dólar, la moneda en la que hace la mayor parte de los intercambios.
Hace un mes, el Banco Popular de China elevó la banda de oscilación de dólar del 0,3% al 0,5% de variación (incremento o recorte) diaria. Pero varios congresistas estadounidenses sostuvieron que no es suficiente y que el Gobierno chino, al impedir una fluctuación libre del yuan, mantiene su moneda un 40% por debajo de su valor de intercambio real, lo que le permite abaratar las exportaciones. Los legisladores norteamericanos han pedido a su Gobierno que apruebe sanciones comerciales contra China por este motivo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 12 de junio de 2007