El pleno del Parlament aprobó ayer por unanimidad una moción en la que se expresa el "apoyo institucional" a la labor que realizan los Mossos d'Esquadra. El texto, apoyado por todos los partidos, "manifiesta la plena confianza para que [los Mossos] puedan continuar ejerciendo con autoridad las funciones que tienen legalmente encomendadas".
En el texto inicial de la moción, que fue defendida por el diputado de Convergència i Unió Quico Homs, se pedía someter a votación la reprobación de Saura. La federación nacionalista rectificó y el cambio permitió que los partidos que apoyan al Gobierno -PSC, Esquerra e Iniciativa- respaldaran la iniciativa, que también contó con el voto de Ciutadans y del PP.
El PP había planteado la víspera una moción de similares características. A diferencia de CiU, los populares no consiguieron el voto de los grupos del tripartito; ni siquiera para mostrar apoyo a la labor de los Mossos.
El momento elegido no es gratuito: los episodios de malos tratos a detenidos en la comisaría de Les Corts y una serie de actuaciones polémicas han revuelto las aguas de la policía autonómica en los últimos meses. Hace unos días, más de 4.000 agentes salieron a la calle para protestar por el "desprestigio" del cuerpo y para pedir la dimisión del consejero de Interior, Joan Saura.
Ausencia de autocrítica
Pese al acuerdo final, en el debate parlamentario de ayer quedaron reflejadas las discrepancias entre Gobierno y oposición. Homs lamentó que los responsables de Interior no hayan asumido "ni un solo gramo de autocrítica". CiU y PP culpan a Saura de fomentar el deterioro de la imagen que la sociedad tiene de los Mossos, por dar a conocer públicamente los casos de malos tratos en comisaría. "Se ha vulnerado el principio fundamental del derecho a la presunción de inocencia", insistió el diputado nacionalista. En una línea similar se expresó el popular Daniel Sirera, que acusó a Saura de "tomar represalias contra los mossos que se manifiestan".
David Pérez (PSC) y Patrícia Gomà (ERC) defendieron la actuación del consejero ecosocialista. Pero quien contestó de forma más contundente a las críticas de la oposición fue Jaume Bosch, de ICV-EUiA: "Actuar cautelarmente no significa romper la presunción de inocencia", dijo Bosch, quien recordó que tanto CiU como PP defendieron en 2005 la instalación de cámaras en comisaría, a la que ahora se oponen.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 15 de junio de 2007