Alrededor de 150 jóvenes tomaron el pasado 12 de abril parte de la Facultad de Físicas de la Universidad Complutense para convertirla en un centro social. En la madrugada de ayer, agentes de la policía nacional desalojaron de forma pacífica a los ocho jóvenes que permanecían allí. Miembros de la denominada Fakultad Okupada Autogestionada dijeron que el dispositivo policial contaba con 14 vehículos policiales.
Según la Delegación del Gobierno, el desalojo se produjo a petición del rectorado. Un portavoz de la Universidad Complutense explicó que el rectorado intentó pactar soluciones alternativas para hacer actos culturales, pero los okupas remitían a decisiones de la asamblea y no se llegó a un acuerdo. Esta parte del edificio está pendiente de una reforma y en breve se iniciarán las obras para acondicionarlo para uso docente.
El edificio ocupado mantuvo durante los últimos dos meses varias pancartas en la fachada en las que llamaba a la recuperación de espacios para los estudiantes. El objetivo de los jóvenes era, según aseguran, crear un espacio para ofrecer "clases populares, actividades y comedores populares".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 16 de junio de 2007