La Asociación para a Defensa Ecolóxica de Galicia (Adega) anunció ayer que recurrirá "a todas las instancias" la decisión del Consello de la Xunta de autorizar la pizarrera de A Campa, en Folgoso do Courel (Lugo). Según el vicepresidente de la asociación, Daniel López Vispo, esta explotación "carece de licencia municipal y, durante muchos años actuó sin un estudio de impacto ambiental". Una vez realizado este estudio se "falsearon" los datos para que la zona no entrase en los límites de la Red Natura.
Por ello, tachó de "inaceptable" la decisión de la Xunta desde el punto de vista urbanístico y ambiental, ya que la zona, a pesar de no estar incluida en la Red Natura, continúa considerándose espacio natural protegido.
Asimismo, la presidenta de Adega, Adela Figueroa, destacó que "la peor consecuencia es la pobreza de la zona, ya que sus habitantes están limitados laboralmente": "No podemos consentir la pasividad política ante el capitalismo en detrimento del bienestar social y ambiental". Por último, el catedrático de Geología en A Coruña, Xoán Ramón Vidal Romaní, tachó de "incomprensible" el interés político en activar estas industrias "que aprovechan sólo el 1% del material que usan", indicó. "Esta explotación supondrá mil Prestige para Galicia", sentenció.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 28 de junio de 2007