La Guardia Civil ha detenido en Brenes (Sevilla) al dueño de una empresa de trabajo temporal después de que varios jornaleros de nacionalidad rumana le denunciaran por no pagarles los salarios que les correspondían por recoger cebollas en dos fincas de Écija y La Luisiana y por alojarles en condiciones insalubres. El empresario, de 57 años e iniciales S. M. R., ha sido acusado de un delito contra los derechos de los trabajadores, según informó el instituto armado.
Los trabajadores acudieron al puesto de la Guardia Civil de Brenes para denunciar que habían estado trabajando durante dos días sin recibir los emolumentos pactados con el empresario. En las fincas los jornaleros trabajaban, según su testimonio, de 7.00 a 19.00 sin parar siquiera para comer. Tras localizar al empresario, éste declaró que los jornales se los había abonado a una tercera persona que hacía de intermediario entre él y los trabajadores.
Tras la detención, los agentes inspeccionaron el lugar donde se alojaban los trabajadores: una nave industrial en la que se habían construido con paneles habitáculos de entre ocho y diez metros cuadrados con dos literas cada uno y un baño común. Por la estancia en estas instalaciones se les cobraba 125 euros mensuales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 1 de julio de 2007