La Guardia Civil requisó ayer un león, de diez años, con signos de desnutrición y falta de higiene que estaba encerrado en una furgoneta con las puertas soldadas en una finca particular de la localidad malagueña de Pizarra. Los agentes intervinieron varias serpientes en la misma finca.
Los guardias acudieron en respuesta a una denuncia ciudadana que alertaba sobre la situación del león, cuyos propietarios carecían de permisos. El animal, tras ser recuperado, pasará a un centro zoológico. La Guardia Civil sospecha que los propietarios del león se dedicaban a la venta de animales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 11 de julio de 2007