"Si firmamos nosotros, que firme todo el mundo", se quejaron los ciclistas cuando la UCI les conminó, so pena de no participar en el Tour, a firmar el código ético por el que se comprometían a luchar por un ciclismo limpio, hasta el punto de devolver sus salarios en caso de dar positivo. La UCI tomó nota; los directores deportivos y auxiliares saben que ellos también están conminados a firmar el mismo documento.
La noticia cayó como una bomba y en la zona de meta se escuchó de todo. "Yo no firmo", dijo uno, que corrió el Tour y ahora está al volante de un equipo extranjero. "Si firmamos nosotros, que firme también la Vaca que Ríe", dijo otro, aprovechando la coyuntura: los camiones de la conocida marca de quesitos llegaban a la meta. La nota colgada ayer en la página web de la UCI generó dudas a los empleados de los equipos. "Y si no firmamos, ¿no trabajamos?", preguntaba uno. "Si en mi equipo dan positivo dos corredores, ¿qué hago, devuelvo el sueldo por el primero y pido un crédito para pagar el del segundo?", dudaba otro, también ex ciclista y padre de ciclista. "Es un despropósito más dentro de la incoherencia de los últimos tiempos", afirmaba un jefe en la avenida Barón Roger du Soultrait.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 11 de julio de 2007