"Se está trabajando intensamente en las negociaciones para obtener un resultado positivo para los intereses valencianos", destacó ayer el delegado del Gobierno, Antoni Bernabé, tras la reunión de casi cinco horas celebrada el martes entre las tres administraciones públicas y la empresa America's Cup Management (ACM) para negociar una nueva edición de la Copa del América en Valencia. Bernabé reiteró el "firme compromiso" del Ejecutivo socialista con el evento y resaltó que "el Gobierno trabajó desde el primer día" para que la competición "fuera un éxito y lo seguirá haciendo para conseguir que la próxima edición del evento se celebre en Valencia".
En la misma línea, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, manifestó: "Las tres administraciones estamos firmemente unidas, y eso es muy positivo". La alcaldesa aseguró que la negociación, en la que también participó el vicepresidente económico, Gerardo Camps, "está viva y va por buen camino". Además, Barberá expresó su confianza en que el posible acuerdo con ACM se cierre antes de agosto y consideró que "dejar el tema abierto" más tiempo no sería bueno. De hecho, las partes tienen prevista en los próximos días otra reunión y las conversaciones e intercambio de documentos son constantes.
Las declaraciones de Barberá sobre la estrecha colaboración con el Gobierno para cerrar un acuerdo con ACM contrastaron con las declaraciones del vicepresidente y portavoz del Consell, Vicente Rambla, quien exigió una "mayor implicación" del Ejecutivo socialista.
El final de las regatas el pasado 3 de julio ha acelerado las negociaciones. En el encuentro del martes en el edificio Veles e Vents de la dársena del puerto, las partes entraron ya en los detalles del borrador del contrato, que recoge las condiciones económicas de ACM y de posibles infraestructuras complementarias, así como cuestiones relacionadas con la explotación comercial de la marina portuaria y los derechos de televisión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 19 de julio de 2007