Todavía no tiene nombre porque no se sabe si es macho o hembra. Los monos tití tardan un año en desarrollar sus órganos genitales. El padre ignora a la cría. Está tan tranquilo apoyado en un árbol mientras la madre la carga a sus espaldas y la lleva de un lado para otro. Son padres primerizos.
El tití sin nombre nació el pasado 13 de abril. Pesó 150 gramos y desde entonces, los visitantes del Parque Temático Faunia (www.faunia.es) ya pueden verlo acompañado de sus progenitores.
El nacimiento de un tití de Goeldi, una especie monógama en peligro de extinción, ha sido todo un logro. El padre es un tití francés llamado Loui, que viajó a España hace dos años cedido por un zoo francés. Los cuidadores no conseguían que criara y no sabían si el problema lo tenía él o las hembras con las que lo intentaban aparejar. Pero Loui estaba la mar de bien. Y con Meg, una mona tití del zoo de Santillana del Mar (Cantabria) se entendió de maravilla. Su primera cría ha nacido sana tras seis meses de gestación y, según Javier Gimeno, biólogo conservador de Faunia, "es muy espabilada".
"Teníamos miedo de que los padres no lo llevaran bien por su inexperiencia y, de hecho, a la madre le costaba mucho llevar a la cría en su espalda. Al final, todo ha salido bien", cuenta satisfecho Javier.
A pesar del esfuerzo, el nuevo tití Goeldi sólo vivirá un año con sus padres. Este pequeño primate de color negro y con una larga cola forma parte del programa CITIES (Comercio Internacional de Especies Amenazadas de fauna y Flora Silvestre) y será trasladado al parque natural que mejor se adapte a sus necesidades.
Precisamente, la recreación de ecosistemas y hábitats naturales de Faunia es lo que ha hecho posible este y otros nacimientos en el Parque, según un portavoz del centro. "Los animales encuentran todo lo necesario para vivir y se reproducen con facilidad", apunta.
Los titís de Goeldi son los únicos de su especie que dan a luz a una sola cría, ya que el resto siempre tienen partos gemelares. Este es el caso de los titís de Pincel, que el 29 de mayo tuvieron una pareja de gemelos no idénticos que aún no se despegan de sus padres.
Pero el baby boom va más allá. Faunia ha dado la bienvenida a un macho y una hembra de oso marino también a finales de mayo tras 12 meses de gestación. El padre se llama Kissy. Tiene siete años y un harén de seis hembras a su disposición. Oprah dio a luz a África y Yoda, a Iboo. Al nacer pesaron seis kilos pero, con el tiempo, superarán los 300. Ahora aprenden a nadar sin la ayuda de sus cuidadores.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 20 de julio de 2007