Ibiza recupera la "normalidad" tras el vertido de fuel sufrido hace diez días, según el informe remitido ayer por el Ministerio de Fomento al Consejo de Ministros. Numerosos bañistas disfrutaron a lo largo del día de las playas de Talamanca y Figueretes, abiertas el pasado jueves. El veto al baño ha durado una semana por la presencia de restos de fuel y aceite procedente del buque hundido Don Pedro.
El miércoles pasado se reabrió la playa más grande, la d'En Bossa. Otras tres calas menores de Santa Eulalia permanecieron cerradas el jueves durante varias horas por la presencia de elementos contaminantes dispersos en el agua y la arena.
La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, anunció ayer tarde en Ibiza -en su tercer viaje a la isla- que ya ha acordado con la naviera propietaria del barco naufragado, Iscomar, el plan de extracción del combustible. El pecio del Don Pedro está hundido a casi tres kilómetros del puerto de Ibiza, a 43 metros de profundidad. El barco embistió contra una roca y naufragó en la madrugada del pasado día 11.
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, afirmó que la situación se ha remontado debido a la "respuesta inmediata" que ha dado el Ejecutivo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 21 de julio de 2007