Las organizaciones agrarias y los ministerios de Agricultura y de Hacienda han puesto en marcha las negociaciones para revisar los impuestos que pagan la mayor parte de los agricultores y ganaderos. Este proceso afectará al sistema de módulos, que estima de forma indirecta los impuestos que debe pagar el contribuyente y que utiliza mayoritariamente el sector agrario. El sector considera que lo que pagan es muy superior a la rentabilidad de las explotaciones.
Según los datos manejados por la Administración, en la actualidad hay aproximadamente 1,2 millones de declaraciones de renta donde se computan actividades agrarias. Sin embargo, de esa cifra solamente unas 273.000 corresponden a agricultores a título principal. La mayor parte del sector agrario se halla acogido al régimen de módulos, mientras unas 60.000 declaraciones lo hacen por el sistema de estimación directa. El 90% de las declaraciones tiene rentas inferiores a los 6.000 euros.
La revisión de la fiscalidad agraria fue uno de los compromisos adquiridos por la Administración en diciembre de 2005 en el acuerdo suscrito con las organizaciones agrarias UPA y COAG sobre medidas para compensar la fuerte subida de los precios del gasóleo. Frente a la posibilidad de proceder a una revisión total de la fiscalidad agraria, Administración y organizaciones agrarias han acordado proceder solamente a la revisión de los módulos.
Agricultura y Hacienda han planteado la negociación del sistema de módulos para varias producciones agrícolas: las de ovino de carne, vacuno de leche, cítricos, tomate para industria, cereales, uva, aceituna de almazara, azúcar y algodón.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 30 de julio de 2007