Esta pinza, que asemeja una boca de cocodrilo, muerde los cacharros más calientes, ya sean ollas o cazuelas, porque la apertura de su mandíbula es muy amplia y, gracias a su capacidad aislante, las manos quedan protegidas del contacto con los objetos de la cocina que pueden quemar. El material de la pinza, fabricada en España, es una silicona especial denominada platino. Gracias a su alta resistencia térmica, este agarrador supera la efectividad de las habituales manoplas de tela, pues hasta los 300º no se funde ni se deforma. Su diseño ergonómico y la flexibilidad del material hace que sea adaptable a cualquier recipiente. El relieve antideslizante de la parte interior garantiza un agarre seguro. La pinza está disponible en verde, azul, fucsia, naranja y violeta, y puede limpiarse en el lavavajillas. Cuesta 13,50 euros. También en silicona platino existe otra gama de productos, como tapaderas, salvamanteles y moldes para helados y postres. Más información en el teléfono 93445 11 03 y en www.lekue.es
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 5 de agosto de 2007