Son los metros que mide la cruz que se acaba de erigir cerca de Moscú para recordar a las víctimas de las purgas estalinistas de los años treinta, según informó ayer la BBC. Tiene 7,6 metros de ancho y está situada en Butovo, sobre un antiguo campo de ejecución. Al menos 20.000 personas fueron ejecutadas allí por la policía secreta de Stalin, la NKVD, y ayer se cumplieron los 70 años de las primeras muertes. El monumento se enmarca en los actos organizados por grupos religiosos y proderechos humanos en Rusia para recordar los cientos de miles de disidentes, militares, intelectuales y campesinos que fueron ejecutados entre 1937 y 1939.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 9 de agosto de 2007