Gracias al señor Zapatero & Co. por entender que los que hemos sido padres entre enero y marzo de 2007 no necesitamos los 2.500 euros que sí se darán a los que lo han sido a partir del 3 de julio. La leche, los biberones, pañales, papillas, etcétera, ¿no valen igual para todos? No lo entiendo, por más que me esfuerce no entiendo por qué no lo han hecho retroactivo a 1 de enero. Eso sí, la ley con carácter universal a todos los bolsillos; pero no desde el 1 de enero a la clase media trabajadora, que está sudando tinta para pagar la hipoteca o el alquiler y los gastos derivados de aumentar la familia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 14 de agosto de 2007