El príncipe Guillermo de Inglaterra y su novia, Kate Middleton, están pasando una semana en una isla remota de las Seychelles. Tras su reconciliación y de los rumores sobre un anuncio inminente de boda, han alquilado la isla (sí, entera) para hablar de sus cosas. El periódico sensacionalista The Sun cita a una fuente cercana al príncipe sobre el porqué de la escapada: "Guillermo estaba desesperado por pasar algo de tiempo a solas con Kate y esta isla es perfecta porque es muy privada". Y tanto.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 19 de agosto de 2007