La crisis hipotecaria estadounidense sigue pesando en el ánimo de los inversores. La incertidumbre domina los mercados. El cierre al alza de Nueva York el pasado lunes y las claras ganancias de la Bolsa japonesa no bastaron para que en Europa se disiparan las dudas. Los parqués europeos abrieron con ganancias, pero no faltaron los que, como Londres, a la hora larga de comenzar perdían más de medio punto, pese a que habían comenzado con un signo completamente opuesto.
En España, las cosas parecían estar un poco más claras. Pese a un comienzo dubitativo, pronto quedó claro que en los parqués nacionales iban a dominar las pérdidas. A mediodía, el Ibex 35 ya acumulaba unas pérdidas de más de un punto. Sin embargo, hacia el final de la sesión se recuperó, apoyado por la apertura levemente alcista de Nueva York.
El Ibex acabó con 14.239,8 puntos, al perder un 0,21%. El resto de índices españoles tuvo un comportamiento similar al del selectivo, excepto el nuevo mercado, que se dejó al final del día un 1,33%. Y es que Indra, una empresa que pondera más de un tercio de todo el índice tecnológico español, perdió casi tres puntos.
Por sectores, las constructoras nadaron contracorriente. Ferrovial encabezó de nuevo, como ya hiciera el lunes, las ganancias en el Ibex 35, acompañada esta vez de FCC y Acciona. No muy lejos entre los valores en verde se situó ACS. En el lado opuesto estaban los bancos, entre los que sólo Banesto escapó a las pérdidas generalizadas del sector.
Los parqués españoles, junto con la Bolsa sueca, desafinaron ayer entre los europeos. Todos los grandes índices avanzaron, liderados por París. Y eso pese a que el dato negativo de confianza entre los empresarios alemanes conocido ayer -que cayó al nivel más bajo en ocho meses- les había arrastrado a las pérdidas a media sesión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 22 de agosto de 2007