El transbordador espacial estadonidense Endeavour no tuvo problemas para volver a la Tierra, a pesar de los ligeros daños en su cubierta térmica. Aterrizó en la primera ocasión de las dos previstas, a las 18.32 (hora peninsular española) en el Centro Espacial Kennedy en Florida, al que se aproximó por el sur sin cruzarse con el huracán Dean.
Tras reentrar en la atmósfera sobre el océano Pacífico a una velocidad 25 veces la del sonido, descendió con un ángulo siete veces mayor que un avión comercial. Había recorrido 1,8 millones de kilómetros en su misión, la número 119 de un transbordador.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 22 de agosto de 2007