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El debate sobre las infraestructuras

El presidente culpa a CiU del déficit de infraestructuras por primar la "identidad"

"Durante muchos años [se ha utilizado] el recurso fácil de cargar todos los problemas a los otros". El presidente de la Generalitat y líder del PSC, José Montilla, se refirió ayer con estas palabras a la política practicada por los gobiernos de Convergència i Unió de responsabilizar a "Madrid" de gran parte de los déficit y problemas que padece Cataluña. Pero ayer en Vilopriu (Baix Empordà), Montilla utilizó esta misma estrategia.

"Hemos de reconocer que ahora estamos pagando demasiados años de gobiernos pasados, demasiado obsesionados por el debate sobre la identidad que por el debate real del país y la definición estratégica de las infraestructuras necesarias para dar respuesta a las exigencias de esta realidad. Demasiados años con el recurso fácil de cargar todos los problemas a los otros", manifestó Montilla ante unos 350 simpatizantes y destacados militantes del partido como Pasqual Maragall, Raimon Obiols, Antoni Castells o Marina Geli.

Esta situación de inversión insuficiente, añadió, ha cambiado desde que el tripartito de izquierdas gobierna en Cataluña, ya que "ha hecho un diagnóstico real y ha empezado a actuar". Sin embargo, el presidente reconoció que entre la ciudadanía se ha instalado "un clima de contrariedad y enojo causado por la acumulación inusual de incidencias y problemas en las infraestructuras". Pero hizo un llamamiento a evitar que este sentimiento acabe derivando en pesimismo. "Los problemas de estos últimos meses se irán resolviendo en los próximos meses", afirmó, gracias a las iniciativas inversoras tanto del Gobierno central como del catalán. Así es como, dijo, debe entenderse la "política", destinada a "dar respuesta a las inquietudes ciudadanas y los retos colectivos". De lo contrario, advirtió, aumenta la desafección ciudadana con los políticos. "Necesitamos más política, no menos".

Montilla aprovechó para negar que Cataluña, como sostiene Convergència i Unió, sufra una crisis de identidad. "Creo que están trasladando la desorientación de su proyecto político al conjunto de la sociedad", concluyó.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 24 de agosto de 2007