Trabajo como empleada fija en una empresa encuadrada en el régimen especial agrario de la Seguridad Social, desempeñando tareas de tipo administrativo. Este mes, por primera vez en 21 años, me han dado una baja médica de una semana por enfermedad común. Cuando lo he comunicado telefónicamente al encargado de personal, me ha recomendado que me incorpore al cuarto día y solicite el alta voluntaria en mi centro de salud. Resulta que por pertenecer al régimen especial agrario, si me pongo enferma siete días, me descontarían ¡193 euros! (se dice pronto) de mi sueldo habitual. Es decir, los empleados de empresas agrícolas no podemos ponernos enfermos, o bien tenemos que acudir enfermos al puesto de trabajo (algo que va en detrimento de nosotros mismos y de los compañeros a los que podremos contagiar).
¿Hasta cuándo esta situación tan injusta? ¿Cuándo piensa el Gobierno eliminar este discriminatorio sistema y encuadrar a todos los trabajadores en el régimen general.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 26 de agosto de 2007