La 33 edición de la Copa del América en Valencia arranca con otro enfrentamiento del Ayuntamiento y la Generalitat con el Gobierno. La alcaldesa, Rita Barberá, y el vicepresidente económico del Consell, Gerardo Camps, arremetieron ayer contra el Ejecutivo por su propuesta de que la presidencia del Consorcio Valencia 2009 sea rotatoria.
Si la Comunidad Valenciana es de primera división, como asegura el presidente Francisco Camps, tiene un pie en segunda, porque el gasto social por habitante es un 18,5% inferior al de las autonomías punteras. Además, el Consell está boicoteando la aplicación de la ley de dependencia y dejará de recibir 40 millones del Gobierno.
El Consell y el PP valenciano están arremetiendo desde hace días contra el Gobierno por autorizar el minitrasvase del Ebro a Cantabria y no el trasvase a Valencia. Ayer recibió la airada contestación del presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, que consideró "insolidarias, injustas y analfabetas" las críticas.
Comisiones Obreras denunció ayer una "persecución ideológica" en la Fundació de la Solidaritat i el Voluntariat. La entidad privada sin ánimo de lucro, financiada por la Consejería de Bienestar Social y Bancaja, despidió de forma improcedente a seis trabajadores en julio después de que celebraran su primera elección sindical, un caso que el sindicato ha llevado ante la justicia.
El frenazo del sector de la construcción en el mes de agosto, una fórmula patronal para evitar pagar las vacaciones a los trabajadores, y la resaca de la Copa del América en la provincia de Valencia, con un alza del desempleo en el sector servicios en plena temporada alta, afloran en los registros de demandas de empleo de agosto con un alza del 6,71% del número de parados, frente a un 2,94% de media en toda España.