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Retratos y bodegones de Picasso en A Coruña y Vigo

Una destacada selección de 74 pinturas y 15 dibujos realizados entre 1914 y 1972, procedentes de colección privada, perfilan la doble exposición Picasso. Laboratorio de estilos. La muestra permanecerá abierta entre el 17 de octubre y el 3 de febrero en las sedes de la Fundación Barrié en A Coruña, donde se mostrarán retratos femeninos, y Vigo, reservado para las naturalezas muertas.

Los 57 retratos femeninos que se expondrán en A Coruña, 16 de ellos inéditos, incluyen primeros planos, composiciones y desnudos recostados de algunas de las amantes del pintor malagueño. Desde la bailarina rusa Olga Koklova, su única esposa, en adelante. Están Marie-Thérèse Walter, Dora Maar, Françoise Gilot (con los inéditos Cabeza de mujer con el pelo rizado y Cabeza de mujer morena de cara) y, sobre todo, Jacqueline Rocque, la más cercana desde 1952 hasta su muerte en 1973. Ella inspiró algunos de los retratos más populares de la exposición, desde Jacqueline en una mecedora con pañuelo negro a La Arlesiana, ambos de los 50.

En el catálogo común de la exposición colaboraron Briggite Leal, del Museo Nacional de Arte Moderno del Pompidou de París, María Teresa Ocaña como asesora científica y Elizabeth Cowling, catedrática de Arte Europeo del siglo XX en Edimburgo. Las especialistas participarán también en las conferencias, visitas guiadas y talleres. La Fundación Barrié, que cumple 40 años, plantea el doble programa expositivo "a modo de festival", cuatro años después de la exposición Picasso joven.

Cubista y surrealista

Los 32 pequeños bodegones -22 inéditos- que se expondrán en Vigo se organizan en dos grupos cronológicos. De 1914 a 1927 y de 1936 a 1947. En el primer grupo, de exaltación cubista y surrealista, se incluyen los inéditos Composición blanca con pipa (1914) y Composición (1915), que repite los motivos recurrentes (copa y pipa) del primero.

La persistencia en la idea del cubismo, la degradación de los postulados surrealistas y la Guerra Civil explican los bodegones posteriores, donde Picasso reinterpreta el barroco español. Aquí se incluye, entre otros, el inédito Bodegón con atún (1937), reinvención del goyesco Bodegón con rodajas de salmón. La carne se muestra cruda en ambos casos.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 8 de septiembre de 2007