El PSOE evitó ayer por la mínima una nueva derrota parlamentaria en el asunto de las infraestructuras catalanas. Tras la reprobación que recibió este verano la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, los socialistas lograron evitar, por 172 votos a 170, que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, tenga que acudir al pleno a explicar esa crisis. Pese a la unión entre PP, CiU, ERC e IU-ICV, el PSOE se salvó por la abstención del PNV y el apoyo del Mixto, representado ayer por el BNG. El PP llevará al Senado la iniciativa, donde los mismos grupos son mayoría clara.
La crisis de las infraestructuras catalanas -apagones continuados, bloqueos de los ferrocarriles, atascos en las carreteras- ha conseguido algo muy inusual en el Congreso: el PP, tradicionalmente aislado, ha votado ya varias veces en este asunto junto a los tres grupos catalanes (CiU, ERC e IU-ICV, que aquí hace lo que pide la parte catalana). Este verano, después de ganar en la Diputación Permanente la reprobación de la ministra, estos grupos ya perdieron por la mínima la votación sobre la comparecencia de Zapatero.
Decidieron entonces llevarla al pleno, donde esperaban ganar. Sin embargo, la petición llegó a la Junta de Portavoces, y allí el voto ponderado (cada portavoz representa a todos los diputados de su grupo) benefició al PSOE.
Los socialistas aportaron su mayoría minoritaria (la absoluta está en 176 y ellos tenían ayer 163 escaños, porque el 164, Rosa Lucía Polonio, había dejado el sillón para ser alcaldesa de Montilla y fue sustituida después de la Junta de Portavoces por Narciso Sicilia). Pero la clave se la dio Francisco Rodríguez, del BNG. El Grupo Mixto (nueve diputados, dos de BNG, dos de CC, uno de Nueva Canarias, CHA, EA, NaBai y el ex PP Joaquín Calomarde) establece un sistema de turnos para sus portavoces. Y este mes le toca al BNG, socio fiel del PSOE, con quien gobierna en Galicia. Así que votó contra la comparecencia y sus nueve escaños fueron fundamentales paras sumar 172 frente a los 170 de PP (147), CiU (10), ERC (8) e IU-ICV (5). La abstención del PNV, otro socio fiel del Ejecutivo, hizo el resto.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 12 de septiembre de 2007