La selección española de voleibol se clasificó ayer por primera vez en la historia para la final de un Europeo que se celebra en Moscú tras ganar a Finlandia (3-2) en un partido muy reñido. Su rival será Rusia, que derrotó a Serbia.
España tenía el partido perdido en el penúltimo set, pero supo rehacerse, logrando un objetivo impensable al comenzar el torneo. Con problemas en una de sus grandes virtudes, la defensa, y en el bloqueo, la selección de Andrea Anastasi se complicó la vida al principio del partido. La salida a la cancha del veterano Rafa Pascual sirvió de revulsivo en el tercer set, cuando el marcador estaba empatado a 1. Duró poco. Poco después España estaba contra las cuerdas, pero logró remontar y forzar el desempate. Ahí ya no tuvo rival. 10-15, y su primera gran final.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 16 de septiembre de 2007