El presidente del PNV, Josu Jon Imaz, afirmó ayer en declaraciones a periodistas que no ha "tirado la toalla" en la pugna interna en su partido por el hecho de haber renunciado a la reelección como líder del partido. Ayer presidió la primera reunión de la ejecutiva del PNV desde que anunció su retirada. El lehendakari, Juan José Ibarretxe, a quien se pidió que no asistiera a la ejecutiva del día 10, sí asistió a la cita.
La ejecutiva del PNV se reunió ayer por primera vez tras anunciar su presidente, Josu Jon Imaz, que no se presentará a la relección. El EBB no realizó ningún pronunciamiento al respecto. Considera que no tiene que hacerlo, porque no le corresponde designar a los candidatos. La negociación para acordar un candidato de consenso continúa fuera de la ejecutiva. El próximo viernes, el PNV celebra una asamblea nacional y ése puede ser, si ha habido un acuerdo, el escenario en el que se dé cuenta a los representantes de la militancia. Muchos dirigentes quieren que el Día del Partido, el día 30, estén despejadas las dudas.
Uno de los hombres fuertes de Joseba Egibar, el presidente de la ejecutiva alavesa, Iñaki Gerenabarrena, dijo ayer que la tensión ha descendido en el partido después del acuerdo sobre la ponencia, que ha generado "espacios de confianza". El PNV no quiso confirmar si el previsible sucesor de Imaz Íñigo Urkullu ha presentado ya su candidatura a la Comisión de Garantías.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 18 de septiembre de 2007