Chaco, una de las regiones más depauperadas de Argentina, le daba ayer al peronismo una inesperada victoria electoral en los comicios a gobernador celebrados el pasado domingo. En una región con un 40% de pobres y donde la mayor fuente de empleo es la administración pública, todo parecía decidido para que el ex gobernador Ángel Rozas, de la Unión Cívica Radical (UCR), se alzara con la victoria. Sin embargo, el peronista Jorge Capitanich se impuso por una diferencia de apenas unas décimas, aunque anoche el lento escrutinio oficial todavía estaba en marcha. Buenas noticias para el matrimonio Kirchner a poco más de un mes de las elecciones presidenciales del próximo 28 de octubre.
Sabiendo que lo tenía casi todo en contra -el radical Rozas es uno de los prebostes de Chaco, que ha sido gobernador ocho años y en los últimos cuatro había colocado en su puesto a un hombre de confianza sólo por imperativo legal-, Capitanich ha apelado a las raíces del peronismo, las que tienen más predicamento entre las clases desfavorecidas, que en Chaco son mayoría. Con una diferencia en contra de 30 puntos en las encuestas, Capitanich optó por no utilizar las siglas del Frente para la Victoria (FPV), la formación creada por Néstor Kirchner y que pretende llevar a su esposa, Cristina Fernández, hasta la Casa Rosada.
Su rostro figuraba junto a las siglas del Partido Justicialista y al escudo peronista. Además, y al contrario de lo sucedido en otras provincias, la pareja presidencial no ha apoyado en persona a Capitanich. Aun así ayer ambos le telefonearon y le comunicaron su satisfacción por la victoria peronista, aunque el presidente Kirchner pidió "prudencia" a Capitanich a la hora de festejar los resultados.
A la victoria peronista en Chaco -norte- se sumó la de Chubut -Patagonia-, donde no hubo sorpresas y el actual gobernador, Mario das Neves, se impuso claramente al candidato radical, Raúl Barneche. Das Neves ya ha prometido su apoyo incondicional a la candidatura presidencial de Cristina Fernández, cuyo objetivo es ganar en primera vuelta, para lo cual necesita superar el 40% de los votos y sacar 10 puntos al segundo clasificado.
Con los comicios del domingo se cierra la serie de elecciones previas al voto presidencial, aunque otras ocho provincias elegirán gobernador el 28 de octubre.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 18 de septiembre de 2007