La Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM) acudió ayer a la comisión de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid. Allí reclamó a los responsables municipales que se interesasen por la situación de aquellos vecinos que padecen los efectos de la actividad del aeropuerto de Barajas.
Andrés Martínez, vecino del barrio y responsable de la comisión de Medio Ambiente de la federación vecina, entregó a la concejal del área, Ana Botella, un escrito con las inquietudes de los vecinos por el retraso por parte de Fomento de la elaboración de la nueva huella acústica y el nuevo plan de aislamiento acústico. Un portavoz municipal aseguró que la concejal de Medio Ambiente estudiará las reclamaciones de los vecinos para que se insonoricen sus viviendas.
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El portavoz vecinal mostró su satisfacción porque el Congreso aprobó el pasado martes una moción, propuesta por IU, en la que se reconoce el derecho de los vecinos a participar en los órganos de vigilancia y control medioambiental del aeropuerto madrileño de Barajas.
Martínez recordó que la ausencia vecinal de estos órganos se debe al incumplimiento por parte de AENA de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del aeropuerto de 1996.
Martínez indicó que "la aprobación de la moción defendida ayer por Montserrat Muñoz es positiva". Y matizó: "La participación de la federación vecinal en la gestión ambiental del aeropuerto ya está recogida en la Declaración de Impacto Ambiental de 1996, pero no se ha cumplido por la manifiesta falta de voluntad de AENA".
Respecto a la nueva responsabilidad, Martínez advirtió de que "permaneceremos vigilantes para asegurar la participación vecinal en los órganos de vigilancia y control del aeropuerto".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 20 de septiembre de 2007