Ése es el objetivo: desarrollar un nuevo modelo realista de profesionalización de las Fuerzas Armadas, para que tengan una dimensión adecuada y los soldados profesionales estén bien pagados y se queden en los ejércitos. Con estos objetivos prioritarios, la política de Defensa para el ejercicio que viene, con una dotación de 8.148 millones de euros, presenta un crecimiento del 5,9% respecto a 2007.
Una cuarta parte de ese dinero, 2.153 millones, se dedicará a inversiones reales, como la compra o modernización de barcos (fragatas F-100, buque de proyección estratégica, otro de aprovisionamiento de combate), aviones (el avión europeo EF-2000 o el A-400M), o misiles (Iris-T, Alad-Taurus o los contracarro Spike).
MÁS INFORMACIÓN
En este capítulo entran las inversiones para conseguir que la Unidad Militar de Emergencias esté plenamente operativa, tanto en dotación de recursos humanos como de material y equipamiento, a finales del año que viene, de forma que pueda intervenir ante cualquier catástrofe.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 26 de septiembre de 2007