Tras cinco años de recorrido, la circunvalación de Pontevedra acaba de superar uno de los últimos trámites antes de que el Ministerio de Fomento proceda a licitar la obra. El Ministerio de Medio Ambiente acaba de publicar la declaración favorable de impacto ambiental que posibilita la licitación de los proyectos constructivos y que el inicio de los trabajos se produzca, previsiblemente, en 2009 "siempre y cuando sea una prioridad política", matiza el concejal de Infraestructuras, el nacionalista Cesáreo Mosquera.
Para esta variante de algo más de 10 kilómetros se ha elegido el trazado "más exterior y alejada" de la ciudad, que responde a las 12.500 alegaciones presentadas para que no entrara en el núcleo urbano. El recorrido modificado minimiza la afección sobre el río Lérez mediante un viaducto y se aleja de la Xunqueira de Alba, reduce el tráfico en el nudo de O Pino, afecta a tres viviendas frente a las 19 del proyecto inicial y facilita la ejecución de accesos. La circunvalación partirá del trazado aprobado de la A-57 hacia el norte y finaliza en el enlace con la PO-223.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 27 de septiembre de 2007