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El ADN dirá si hubo violación a una interna de un geriátrico en Llíria

J. V. S. permanece en prisión desde primeros de agosto por un supuesto delito de violación a una anciana, de 79 años, con Alzheimer internada en la residencia Jardines de Llíria el 6 de agosto pasado. La prisión fue solicitada por el fiscal y acordada por la juez de Llíria que instruye la causa por entender que existían indicios de la comisión del delito ya que la exploración realizada a la víctima evidenció, tal como consta en el informe forense, que tenía restos biológicos en la vagina y erosiones compatibles con una agresión sexual.

Los hechos fueron denunciados ante la Guardia Civil por otra trabajadora del centro que escuchó gritos que provenían de la sala donde los pacientes ven la televisión en la tercera planta del centro. Según su relato, que mantuvo también ante la juez, entró a ver qué sucedía y se encontró a la anciana en un sillón grande, inclinada de espaldas, sin los pañales, con una blusa, y a su compañero, J. S. V., de 30 años, sujetando a la mujer por la parte trasera de la cintura con los pantalones bajados a los tobillos y una camiseta levantada hasta los hombros. Él niega la acusación, dice que estaba perfectamente vestido y que estaba colocando los pañales a la interna. De hecho, defiende que las pruebas de ADN demostrarán que todo es una invención de la denunciante.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 1 de octubre de 2007