Fernando Valdivielso es director general de Nortel en España desde el año pasado. Nacido en Burgos en 1968, después de estudiar Ingeniería de Telecomunicación trabajó en Samsung Electronics, Lucent Technologies, Network Solutions Architect y AT&T, antes de Nortel. Valdivielso es un tecnólogo convencido que trabaja con el portátil, emplea un PC de sobremesa en casa y, por supuesto, siempre lleva encima una agenda electrónica "que ya es casi un tercer portátil".
Pregunta. ¿Así que está todo el día enchufado?
Respuesta. La comunicación la tengo, de una u otra forma, siempre abierta 24 horas.
P. ¿Quién le arregla los ordenadores?
R. Los que de verdad saben arreglarlos, los técnicos.
P. ¿Le gusta estar a la última en tecnología o aprovecha los PC todo lo que puede?
R. Después de haber pasado por una empresa de electrónica de consumo, me atraen mucho todas las novedades que van apareciendo en el mercado y me gusta disfrutar de las ventajas que las últimas tecnologías aportan.
P. ¿Cuál es el último regalo tecnológico que le han hecho?
R. Mi mujer me ha regalado una cámara de vídeo de alta definición. Yo me he comprado unos auriculares con reducción de ruido, hasta el 92%, que me permiten poder escuchar la música con mucha más calidad del sonido.
P. ¿Qué imagen ha puesto en el salvapantallas?
R. Aunque sea burgalés, una playa.
P. ¿Se pone normas para usar el móvil?
R. A partir de las once de la noche o donde pueda molestar, lo pongo en modo silencio.
P. ¿Puede vivir un director general sin Internet?
R. Sí, pero mal por la intranquilidad que da no acceder a la información.
P. ¿Tiene iPod?
R. Tengo un lector de MP3 para escuchar música y algún que otro podcast de noticias o reportajes. Siempre intento aprovechar al máximo la capacidad que me ofrecen los 8 Gb con los que cuenta.
P. En casa, ¿es usted quien hace las fotos digitales?
R. Sí, me llevo muy bien con la cámara de fotos. Tengo un modelo compacto de 10 megapíxeles que es muy sencillo de usar y hace fotos de gran calidad.
P. ¿Las imprime?
R. Hago muchas fotos, pero no las imprimo nunca.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 4 de octubre de 2007