El mismo día que la Consellería de Política Territorial colocaba en Vilalba la primera piedra del último tramo de la autovía AG-64 para enlazar Ferrol con la capital de la Terra Chá, el presidente provincial del PP en A Coruña acusaba al gobierno de Touriño de "ineptitud" en la consecución de una obra "que sale cara a los gallegos". Juan Juncal aprovechó el inicio de las obras para recuperar la vieja polémica que alimentó el tramo Cabreiros-Vilalba, y que, en opinión del popular, debería ser financiado por el Gobierno central basándose en el compromiso adquirido en 2002 por el ex ministro de Fomento Francisco Álvarez-Cascos.
Juncal, ex alcalde de Ferrol, criticó que la Xunta "se vea obligada" a afrontar una obra presupuestada en 37'4 millones de euros, ante "la espantada" de la ministra Magdalena Álvarez, que, según él, anuló el protocolo suscrito por Manuel Fraga. La conselleira de Política Territorial, María José Caride, presidió en Vilalba el acto de colocación de la primera piedra de un último tramo de 13'4 kilómetros entre Cabreiros y Vilalba para completar la obra. Caride acudió acompañada de algunos de los regidores de los siete municipios que atraviesa la AG-64 en su trazado, entre ellos el de Ferrol, el socialista Vicente Irisarri.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 9 de octubre de 2007