El nuevo Estatuto del Trabajo Autónomo, que entrará en vigor mañana, no ha complacido a la Organización de Autónomos de Cataluña (Autcat), que representa a 15.000 trabajadores. El estatuto define la figura del trabajador por cuenta propia y fija un catálogo con sus derechos y deberes. Es la culminación de un largo proceso de reivindicaciones por parte de un colectivo cada vez mayor.
Pero el presidente de Autcat, Enric Rius, le ve muchas carencias y lo califica de "acto de cobardía". Echa en falta que el texto recoja una protección patrimonial para el autónomo e iniciativas concretas empresariales. Rius opina que si el estatuto "se queda corto" es porque incluir y concretar medidas, como las que reclama, implicaría más presupuesto".
También arremete contra otro aspecto del texto, el que regula el régimen de autónomo dependiente, o aquél cuyos ingresos dependen al menos en un 75% de un solo cliente. Con la nueva ley, estos empleados podrán disfrutar de hasta 15 días de vacaciones al año y de una indemnización en caso de que su relación laboral con la empresa sea rescindida sin causa justificada. "Es una relación que la propia ley define de naturaleza civil o mercantil y el nuevo estatuto la somete a jurisdicción laboral", critica Rius.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 11 de octubre de 2007