Es difícil cuantificar la rentabilidad científica de un congreso. Pero la Universitat de València ha calculado el gasto realizado por quienes acudieron a los que organiza: en el último mes, los 2.600 participantes se dejaron tres millones de euros en la ciudad.
El estudio elaborado por Luisa Andreu, profesora de Comercialización e Investigación de Mercados, toma como referencia el gasto medio por delegado y día en las reuniones celebradas en 2006, 294,61 euros, fijado por el Spain Convention Bureau (SCB), una entidad sin ánimo de lucro dependiente de la Federación Española de Municipios y Provincias.
El maratón de congresos que ha reunido en la ciudad a los 2.600 asistentes desde que empezó septiembre la abrió el de la Sociedad Española de Neurociencia (de ámbito nacional y con 746 delegados); y la cerró la semana pasada el tercer encuentro de trabajo sobre fuerzas fundamentales del universo, que reunió a 160 físicos.
El promedio de gasto elaborado por el SCB no incluye el coste del desplazamiento hasta Valencia, y sí la inscripción diaria en el congreso, el alojamiento, el transporte interno, los gastos en comidas, en compras y en ocio. La planificación a medio plazo de los encuentros y el poder adquisitivo de los participantes hace que los congresos sean muy atractivos para los destinos turísticos, indica Andreu.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 12 de octubre de 2007