El Consejo de Ministros aprobó ayer medidas urgentes para reparar los daños causados por las intensas tormentas e inundaciones que sufrió gran parte de la Comunidad Valenciana entre el 11 y el 18 de octubre.
El Gobierno financiará hasta el 50% de la reparación de las infraestructuras y servicios de titularidad municipal dañados, y la red viaria de las Diputaciones provinciales. Los productores agrícolas y ganaderos que no tengan cubierto en su póliza de seguros el riesgo catastrófico, serán indemnizados y se eximirá del impuesto de bienes inmuebles (IBI) de 2007 a viviendas, establecimientos industriales y mercantiles y explotaciones agrarias cuando los daños por las inundaciones hayan obligado al realojamiento total o parcial personas o bienes. También se reducirá el impuesto de actividad Económica (IAE) para los establecimientos, industrias o profesionales que hubieran tenido que cerrar temporalmente por las tormentas.
En materia de vivienda, se concederán ayudas personales por daños en casas y en enseres de primera necesidad. El Ministerio de Vivienda firmará convenios de colaboración con la Comunidad Valenciana para financiar la rehabilitación de viviendas muy dañadas y el Instituto de Crédito Oficial pondrá en marcha una línea de crédito preferencial para los afectados.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 20 de octubre de 2007