La incertidumbre en torno a la Copa del América no se despeja. La comparecencia ante la justicia de las dos partes en litigio por las reglas de la competición, el vencedor de la última edición, el suizo Alinghi, y el equipo norteamericano BMW-Oracle, sólo sirvió para aclarar que la espera se alarga unas semanas. El juez de Nueva York Herman Cahn prometió el lunes un veredicto rápido, lo que se traducirá en un plazo de entre dos y cuatro semanas, en las que queda margen para un acuerdo.
Representantes de ambos sindicatos volvían a reunirse ayer en Nueva York. El contenido del encuentro no se ha desvelado. Alinghi, que ya ha aplicado importantes modificaciones al protocolo de la competición, agota toda opción de negociación para evitar una resolución judicial. Oracle, por su parte, insiste en que prefiere una salida amistosa al conflicto, aunque de momento no ha cedido un ápice en sus pretensiones. Es más, a los gestos de Alinghi ha respondido con más exigencias. Para los norteamericanos no sería un problema que la competición se retrasara uno o dos años; tendrían más tiempo para prepararse. Los suizos prefieren 2009.
America's Cup Management (ACM) también remarcó su voluntad y la del Alinghi de llegar a un pacto cuanto antes. Pero la Copa en 2009 sigue en el aire. "La resolución del juez mantiene la incertidumbre", admitieron en ACM, que analiza el impacto de esta nueva espera. La falta de certeza sobre el año de celebración "no ayuda", ya que frena la inscripción de equipos, los acuerdos con los patrocinadores, así como la formación de las tripulaciones. Y sigue pendiente la creación del Consorcio Valencia 2009, que firmó el contrato con ACM y en el que las tres administraciones tienen que ponerse de acuerdo sobre la presidencia. Las preocupaciones de la empresa, sin embargo, se centran ahora al otro lado del Atlántico. El concejal de Deportes, Cristóbal Grau, buscó el lado positivo y destacó que las dudas "no se alargarán más allá de un par de semanas".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 24 de octubre de 2007